La artista y productora colombiana Soy Emilia continúa su evolución musical redefiniendo los límites del Electro Dance Pop con el lanzamiento de «Morfo», el tercer sencillo de su esperado EP Ecdisis. En esta etapa artística, Soy Emilia reafirma su lugar como una creadora completa que combina composición, producción y un concepto visual y sonoro sofisticado.
Tras la presentación de los sencillos Bífida y Equilibrio en 2024, Morfo amplía el espectro sonoro del EP Ecdisis. La letra de Morfo representa exactamente el estado de la artista en este EP, habla de una metamorfósis, una transformación, algo necesario para superar etapas que nos incomodan en la vida y nos hacen sentir estancados. “Ya no puedo hablar, no quiero ver, no sé pensar, no quiero escoger”, el precoro demuestra una insatisfacción personal a una vida diaria que requiere de cambios para llegar a otro estado mental donde sentirse mejor.
Influenciado por artistas como LCD Soundsystem, la surcoreana Yaeji y el clásico New Order, este sencillo fusiona un ritmo vibrante y contemporáneo con elementos orgánicos que refuerzan su propuesta de reinvención musical. Morfo combina líneas de bajo eléctrico con sintetizadores análogos, creando texturas hipnóticas y capas sonoras que evocan un estado de trance. Las baterías orgánicas, grabadas en Bogotá, añaden un groove cálido y envolvente que invita al movimiento. Todo esto se unifica bajo las frecuencias de la primera máquina de cinta en Colombia, Maramachines, logrando un sonido único y de alta calidad.
Después del éxito de sus álbumes Reconstrucción (2019) y Agridulce (2022), Soy Emilia tomó una pausa para redefinir su identidad como artista. Con Ecdisis, no solo mantiene la autenticidad que la caracteriza, sino que también eleva su propuesta musical a través de una producción más elaborada, un sonido más electrónico y una narrativa visual y sonora profundamente conectada con su mensaje.El lanzamiento de Morfo es acompañado del videoclip oficial dirigido por el colombiano Simón Hernández, inspirado en las películas de terror clase B, con la metáfora de la transformación como eje central.